Los iqueños le debemos mucho a nuestra gente. En realidad, Ica es… lo que es nuestra gente. Nuestro liderazgo agrÃcola, nuestra pesca de excelencia, nuestra pujante minerÃa y siderurgia, nuestros encantos turÃsticos y culturales, y – por supuesto – nuestros inigualables piscos y vinos son lo que son… por nuestra gente. Y no me refiero – únicamente – a los iqueños de toda la vida, que son lo máximo. Me refiero también a los miles de migrantes que vinieron de todas partes – sobre todo, de la Sierra – para trabajar en nuestra región… y para vivir y prosperar con nosotros.
Efectivamente, nuestra agricultura y avicultura jamás habrÃan crecido tanto – ni serÃan tan modernas y competitivas – sin el aporte laborioso y talentoso de los excelentes trabajadores huancavelicanos, ayacuchanos, y demás regiones del paÃs.
Algo parecido sucede con los trabajadores pesqueros, mineros, e industriales, quienes han hecho de Ica, la gran región que somos. Por ello, Ica acoge con la máxima cordialidad a todos nuestros trabajadores: pescadores artesanales y pesqueros industriales, pequeños mineros y trabajadores de grandes mineras y plantas metalúrgicas, trabajadores de empresas de energÃa, trabajadores textiles y artesanos, trabajadores de empresas concesionarias, etc. En ese sentido, Ica es – también – lo que son nuestros trabajadores.
Lo mismo se puede decir de la gente que trabaja en el turismo, hotelerÃa, gastronomÃa, folklore, cultura, deporte, servicios públicos, etc. Incluidos, por cierto, los que producen los mejores piscos y vinos del mundo. Bienvenidos los trabajadores a Ica… vengan de donde vengan, y trabajen donde trabajen. Ica es su casa.
Bienvenidos también los empresarios que quieran hacer negocios en nuestra región. Porque Ica es – también – lo que son nuestras empresas. No importa su origen. Si son iqueños… ¡excelente! Pero si no lo son… ¡da lo mismo! Bienvenidos los empresarios de otras regiones del paÃs y del exterior. Los iqueños – al menos, la gran mayorÃa – no tenemos “complejo de localismoâ€, tal como tienen otras regiones hermanas; y menos creemos en el estatismo… de triste recordación en nuestro paÃs. En Ica… bienvenidas las empresas – vengan de donde vengan – siempre y cuando sean formales, responsables, y rentables.
SÃ; en Ica queremos que nuestras empresas ganen dinero – dinero bien habido – porque las ganancias generan impuestos. Además, si les va bien a nuestras empresas, les va bien a nuestros trabajadores, y – consecuentemente – nos va bien a todos. Por ello, bienvenidas las empresas – y los inversionistas – a Ica. AquÃ, confiamos mucho en los pequeños negocios… y en los grandes también. ¡Cómo no estar identificados y agradecidos con nuestras empresas, si nuestro envidiable pleno empleo se lo debemos a ellas! Empresas – repito – que generan empleo formal, respetan el medio ambiente, y pagan sus impuestos. Impuestos que – bien utilizados – generan bienestar. Concretamente, agua, salud, educación y seguridad… las cuatro lÃneas maestras de nuestro plan de gobierno.
Los iqueños veneramos el éxito… individual y empresarial. En ese sentido, estamos en desacuerdo con ciertos compatriotas – llámense polÃticos, intelectuales, periodistas, sindicalistas, etc. – que lo único que hacen es refunfuñar contra las empresas privadas y las personas exitosas. Repito. Ica es – también – lo que son nuestras empresas.
Por último, bienvenidos los visitantes. Si son de la Selva… perfecto. Que traigan sus dejos y sus aparejos. Si son de la Sierra… excelente. Que traigan sus cantos y sus encantos. Si son de la Costa… estupendo. Que traigan sus danzas y sus usanzas. Y si son del extranjero… igual. Que traigan sus culturas y sus dulzuras. Ica es su casa. Pero eso sÃ… no traigan nada de beber ni de comer. El Pisco, el Vino y el Pallar… lo ponemos nosotros.
P.D.: Ningún hospital de Ica acató el paro convocado por la Federación Médica del Perú. ¡Qué orgullo trabajar con gente asÃ! A eso me referÃa. Ica es… lo que es nuestra gente. ¡Salud con Pisco… por nosotros los iqueños!
Fuente: Correo ICA.